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Antes del amanecer en el bosquecito Matero, cerca de las 7:40 am del 16 de abril de 2025. El registro fue realizado con ZOOM H6, usando la cápsula MS (Mid-Side). Luego fue editado con Audacity 3.7.3. El archivo wav original (48 kHz 24 bits) fue exportado en formato mp3 en modo Variable (220 - 260 kbps).
Before dawn in the Matero grove, around 7:40 a.m. on April 16, 2025.. The recording was carried out with ZOOM H6, using the MS (Mid-Side) capsule. It was then edited with Audacity 3.7.3. The original wav file (48 kHz 24 bits) was exported in mp3 format in Variable mode (220 - 260 kbps).
No hay cosa más capaz de hacernos calar en el conocimiento de la miseria humana, como el considerar la verdadera causa de la agitación continua, en que pasan los hombres toda su vida. El alma es encerrada en el cuerpo, para hacer en él una mansión de poca duración. Sabe que no es más que un paso, para un viaje eterno, y que no tiene más que lo poco que dura la vida para prevenirse a él. Las necesidades de la naturaleza le roban una gran parte. No le queda sino muy poco de que poder disponer. Y sin embargo eso poco que le queda la incómoda en tanto grado, y la embaraza tan extrañamente que ella no piensa sino en malograrlo. El tener que vivir consigo, y el tener que pensar en sí, es para ella una pesadumbre insoportable. De aquí nace, que todo su cuidado es olvidarse a sí misma y dejar correr este tiempo tan corto, y tan precioso sin reflexión, ocupándose en cosas que le embarazan pensar en esto. Este es el origen de todas las ocupaciones tumultuarias de los hombres, y de todo lo que llamamos deporte o pasatiempo; en lo que no hay más cuidado que el de dejar pasar el tiempo sin sentirlo, o por mejor decir sin sentirse a sí mismo, y evitar, perdiendo esta parte de la vida, la amargura y desazón interior, que forzosamente acompañan a las consideraciones que en aquellos ratos haría uno sobre sí mismo. Nada halla en sí el alma que la contente. Nada ve que no la aflija cuando en esto piensa. Esto es lo que la constriñe a derramarse por de fuera; y a buscar en la aplicación a las cosas exteriores el modo de perder la memoria de su verdadero estado. En este olvido consiste su gozo, y para hacerla miserable basta obligarla a que se mire y a que esté consigo. A los hombres desde la niñez se les encarga el cuidado de su honor, de sus bienes, y aun del bien, y del honor de sus parientes, y amigos. Los abruman con el estudio de las lenguas, de las ciencias, de los ejercicios, y de las artes. Los cargan de negocios: les hacen creer que no pueden ser dichosos si con su industria, con su cuidado no logran que su fortuna, su honor, y aun la fortuna, y honor de sus amigos se pongan en buen estado, y que una sola de estas cosas que les falte los hará desdichados. Por tanto les dan empleos, y negocios que los hacen correr desde que Dios amanece. ¡Ola, me dirás, extraña manera de hacerlos dichosos! ¿Pues que podrían hacer más, para hacerlos malaventurados?… No era menester más que quitarles todos esos llamamientos. Por qué entonces se verían a sí mismos, y pensarían en sí mismos; y esto es lo que les es insoportable. Por eso también después de haberse cargado de tantos negocios, si tienen algún rato de descanso, procuran perderlo también en alguna diversión que los ocupe de todo en todo, y los distraiga de sí mismos. Esta es la causa por la que cuando me paro a contemplar las diversas agitaciones de los hombres, los peligros, y los pesares a que se exponen en la corte, en la guerra, en seguimiento de sus ambiciosas pretensiones (de donde nacen tantas querellas, tantas pasiones, y tantas intentonas peligrosas) digo muchas veces que toda la desventura de los hombres nace de no saberse estar quietos en un cuarto… Hé conocido que la aversión que tienen los hombres al sosiego, y a vivir consigo mismos, procede… de la desdicha natural de nuestra condición flaca y mortal, y desdichada en tanto grado, que no hay para nosotros consuelo, cuando no hay quien nos estorbe pensar en ella, y cuando no vemos sino a nosotros mismos. Pensamientos de Pascal sobre la religión (Don Andrés Roggiero, 1790).
Type
Mp3 (.mp3)
Duration
16:25.087
File size
30.2 MB
Sample rate
44100.0 Hz
Bitrate
256 kbps
Channels
Stereo